La
elaboración de probetas de hormigón se realiza con la finalidad de determinar
la resistencia y calidad del hormigón.
Para
la elaboración de probeta se necesita un molde cilíndrico de 15 cm de diámetro por 30 cm de alto, de un material
indeformables como puede ser el acero, hierro u otro material.
Cada
capa de hormigón se compacta con una varilla lisa de 5/8” de diámetro con la
punta semiesférica.
La
toma de muestra se realiza después de haberse descargado un 15% de la mezcla y
antes de vaciarse el 85% de la mezcla restante. Se debe tomar la cantidad
suficiente de mezcla para la elaboración de la probeta.
Preparación de las probetas.
1.
Se coloca una
capa de mezcla a un 1/3 de altura del recipiente de manera uniforme, se
compacta con la varilla lisa realizan 25
penetraciones de manera uniforme en todo el molde sin abollarlo ni deformarlo.
2.
En la segunda
capa se coloca la mezcla en el molde y se distribuye de manera uniforme en el
otro 1/3 del molde, luego se procede a
compactar con la varilla realizando
25 penetraciones de manera uniforme, penetrando 1” pulgada (2.54 cm) aproximadamente en
la primera capa.
3.
En esta capa se
debe agregar suficiente mezcla en el molde, de manera que este que lleno por
completo, luego se procede a compactar
con la varilla realizando 25
penetraciones de manera uniforme, penetrando 1” pulgada (2.54 cm) aproximadamente en la segunda capa. Una vez compactada esta
última capa esta se debe enrasar.
Se
debe identificar la probeta con una ficha con la fecha, ubicación del concreto
vaciado y el nombre de la obra. Luego se procede a cubrir la probeta para
evitar la perdida de humedad, en las primeras 24 horas la probeta debe quedar
curándose en obra, evitándose golpe y movimiento.
Después
de quitarse el molde, la probeta se debe curar en un recipiente con agua. El
agua debe cubrir por completo la probeta.
La
rotura de la probeta se realiza a los 28 días.
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